miércoles, 23 de mayo de 2012

10 razones por las que las empresas contratan a un freelance


Normalmente nos fijamos en aquellas cualidades que nos pueden hacer destacar para obtener un empleo para profesionales, o en esas otras prácticas que debemos evitar. Sin embargo, en pocas ocasiones adoptamos el punto de vista del cliente. ¿Qué es lo que mas valoran? ¿En qué se fijan? ¿Coinciden sus valores con los nuestros?

Precio

Aunque no es el factor más importante, lo cierto es que el precio sigue siendo uno de los elementos que más atren a las empresas a la hora de contratar profesionales freelance.
A nadie se le escapa que incluso, muchos clientes ponen el precio por encima de muchas otras cuestiones y por lo tanto, no es algo que podamos dejar de lado. No obstante, si lo que queremos es ganarnos la vida con un trabajo freelance por internet, el factor precio nunca puede ser el que tenga más peso.

Prestigio

Es cierto. Existen empresas y clientes que ofrecen trabajos para freelance basándose casi exclusivamente en su prestigio. Sin embargo, no son muchos los profesionales cuyo prestigio sea conocido más allá de un nicho muy concreto y por lo tanto, no deberíamos confiar demasiado en este factor.
Existen freelancers de prestigio, profesionales que son conocidos más allá de los foros y las redes sociales y que cobran muy bien por su trabajo pero repetimos, son una minoría.

Conveniencia

Uno de los grandes factores que motivan la contratación, por ejemplo, de un diseñador web freelance. Resulta más sencillo contratar al profesional que está en el lugar adecuado y en el momento justo que aquel otro con el que resulta difícil contactar.
Es mucho más sencillo contratar a un profesional que aparece en los primeros resultados de Google que otro que debemos buscar en un foro especializado…es más fácil contratar a alguien con presencia en redes sociales que a otro que no la tiene…y así un largo etc.
En el factor de conveniencia también habría que incluir la confianza. Es más fácil volver a contratar a ese freelance con el que hemos trabajado antes, que arriesgarnos a buscar a alguien nuevo.

Reputación

La reputación de una persona con un trabajo freelance España, Argentina, Colombia o en cualquier lugar del mundo, es su mayor activo. Debe ser protegida y defendida a capa y espada. Si hablan bien de nosotros, si somos recomendados, si la mayor parte de las críticas que obtenemos son positivas…estaremos en el buen camino para, algún día, llegar al punto dos: prestigio.
Una mala reputación en cambio, puede producir efectos devastadores. El poder de la mala reputación es muy superior al de la buena porque un único cliente, puede arruinar una trayectoria intachable.

Miedo

El miedo, aunque no lo creamos, puede ser un fuerte motivador para muchos clientes y empresas. Un cliente puede tener miedo de apostar por nuestros servicios, o al revés, puede temer el no hacerlo, también puede existir un temor por poner vacantes freelance al conocer muy bien mercado.
Si detectamos ese miedo, lo mejor que podemos hacer es intentar averiguar dónde se encuentra su origen, qué es lo que lo motiva y por supuesto, actuar en consecuencia si es posible.

Expectativas

En cierto modo, el negocio del trabajo freelance se basa en crear expectativas y por supuesto, ser capaces de responder a las mismas. Si nuestros clientes esperan grandes cosas de nosotros y somos capaces de proporcionárselas, la posibilidad de que repitan es muy alta.
Ni que decir tiene que hay que saber generar las expectativas con las que creemos que podemos cumplir. De nada nos sirve prometer algo que ya sabemos que no vamos a poder hacer por el simple hecho de ganar un cliente.

Confianza

Una inmensa mayoría de las relaciones entre empresas, y por supuesto entre empresas y freelancers, se basa en la confianza.  Esta confianza es especialmente intensa cuando la relación se produce a distancia por el trabajo por internet, y más aún, cuando todo el contacto que mantienen las partes son llamadas telefónicas o unos cuantos e-mails. Si no generamos confianza, no hay negocio. Así de simple.

Relaciones personales

Las relaciones personales que mantenemos o que podemos mantener con un potencial cliente, sirven de base y cimentan esa confianza de la que hablábamos en el punto anterior.
Si somos capaces de mantener una buena relación, y si esa relación puede escapar (aunque sea un poco) del terreno puramente profesional, aumentaremos enormemente nuestras posibilidades.

Valor añadido

Hay miles de freelancers que probablemente hacen lo mismo que nosotros a un precio muy similar así que…¿Cuál es nuestro valor añadido? ¿Qué es lo que nos va a diferenciar de nuestra competencia? Hay que tener muy claro este punto porque en último término, nuestro cliente puede tenerlo muy en cuenta.

Promociones, ofertas y descuentos

A nadie le amarga un dulce. El freelance debe conocer las bases de una buena negociación y por supuesto, saber venderse. Puede que tengamos nuestras “tarifas oficiales” pero también puede que dependiendo del tipo de cliente, y sobre todo, de lo que podamos obtener después de ese primer encargo, nos convenga dar un trato más “amable”.

miércoles, 9 de mayo de 2012

10 Sorpresas al Pasar al Mundo Freelance


Dejar nuestro trabajo actual y “montárnoslo por nuestra cuenta” puede ser el sueño para más de uno de nuestros lectores. La libertad de ser nuestro propio jefe, el vivir de una actividad que nos gusta y en la que somos realmente buenos, el poder decidir cuándo y cómo queremos trabajar desde casa por internet…son algunas de las ventajas que saltan a la vista cuando se acaricia esta posibilidad.
Sin embargo los que están considerando seriamente esta posibilidad, así como los que hace poco que han empezado, sin duda no tardarán demasiado tiempo en llevarse más de una sorpresa. 

1. Empezar es barato

Cuando pensamos en iniciar nuestro negocio como trabajo freelance, contamos con la ventaja de que el coste inicial va a ser muy inferior al de poner en marcha cualquier otro tipo de empresa. No tenemos que pagar nada a ninguna franquicia, no tenemos que alquilar ninguna oficina, no necesitamos contratar a ningún empleado…etc.

2. La importancia de saber vender

Saber vender es un arma fundamental si queremos convertirnos en un buen trabajador freelancer.  Sabemos que es algo que no le gusta a casi nadie, y menos a un freelance, cuyas características principalmente creativas, le hacen “aborrecer” todo aquello que tenga que ver con el “encorbatado” mundo del comercial.
Sin embargo disponer, o adquirir ciertas habilidades comerciales, resulta fundamental para el éxito de nuestro negocio porque sin ventas, no hay negocio.

3. Actualización constante

Estamos de acuerdo en que todos los trabajadores deben actualizar sus conocimientos de forma continua, pero esto es especialmente cierto en el caso de los freelancers bolivia, colombia o en cualquier país. Profesionales que deben dominar su campo de acción y estar al día de todas las novedades que se producen.
Esto implica no solo actualizar sus conocimientos, sino ser conscientes de cuándo conviene cambiar el software y el hardware con el software, detectar las novedades de nuestro sector y nicho de actividad, etc.

4. La importancia de la comunidad on-line

La inmensa mayoría de los campos y sectores en los que podemos desarrollar nuestra actividad como freelancers, suelen contar con una importante comunidad on-line, bastante activa, que se reúne en torno a foros, webs especializadas, grupos en las redes sociales, blogs, etc.  Formar parte activa de esta comunidad, nos va a ayudar a mejorar nuestro trabajo como profesionales, sobre todo al reforzar al punto 3 de este decálogo.

5. Tarifas

A la hora de establecer una tarifa por nuestro trabajo por internet, existen tantos factores que se pueden tener en cuenta (habilidades, reconocimiento de la comunidad, experiencia, etc.) que es difícil determinar exactamente cuánto debemos cobrar, si debemos cobrar lo mismo a todos nuestros clientes, si debemos mantenernos por encima o por debajo de la media del sector, etc.

6. ¿Seguro que no tenemos jefe?

Muchas personas con trabajos freelance eligen este camino porque piensan que de esta forma ellos son sus propios jefes y no van a depender de nadie. Esto es falso por dos motivos fundamentales.
El primero es que al ser nuestro propio jefe, las posibilidades de que seamos mucho más duros con nosotros mismos de lo que sería cualquier otra persona, son altísimas. El nivel de auto exigencia y responsabilidad a la que nos vamos a someter, probablemente supere al que experimentábamos en nuestra empresa.
Por otro lado, a partir de ahora, nuestros clientes pasan a ser nuestros jefes. Y si en ocasiones nos puede ir bastante bien, en otras, puede convertirse en un pequeño infierno.

7. La importancia del social media

Las redes sociales se han convertido en una herramienta fundamental para que los freelancers de den a conocer.  Además, también pueden convertirse en una herramienta para impulsar sus ventas, y establecer una relación más estrecha con sus clientes y sus potenciales clientes.

8. La importancia de la auto-disciplina

Cuando trabajamos por nuestra cuenta, es importante tener en cuenta que tenemos que cumplir con el trabajo desde casa que tenemos por delante. Tengamos o no tengamos en ese momento clientes, sea poco o mucho el trabajo que nos espera, ser autodisciplinados y privarnos de más tiempo de descanso del que podíamos disfrutar siendo asalariados, resulta al final ser fundamental si queremos triunfar en este campo.

9. Un trabajo global

Otra gran diferencia entre un trabajo “tradicional” y nuestra nueva vida con trabajo freelance, consiste en que a partir de ahora nuestro mercado no se limita a nuestra ciudad o nuestro país, nuestros clientes potenciales se encuentran en cualquier país del mundo.

10. Menos tiempo libre

No es divertido estar enfermo y aún así, tener que trabajar. Ni pensar que vamos a poder disfrutar de un “puente” y al final darnos cuenta de que no va a ser posible. Cuando somos freelancers, el tiempo deja de ser nuestro pasa pasar a ser de nuestros clientes. Puede que tardemos un tiempo en aprender a gestionar correctamente el tiempo, y que tardemos un tiempo en poder disfrutar unas vacaciones de verdad.